El ingenio no conoce límites

Qué tal queridos lectores de este Sótano, este día aprenderemos a solucionar, con el uso de nuestra imaginación, algunos de los problemas más cotidianos. Manos a la obra.

Primer problema: Estás en el trabajo, acabas de servirte una rica sopa de tortilla y te dispones a comerla, pero te das cuenta que trajiste todo menos una cuchara.

Solución: Corta la parte inferior de un vaso de unicel e introduce en el,  con mucho cuidado, un tenedor. Te quedará algo muy parecido a lo mostrado en la siguiente fotografía. ¡Bon apetit!

Segundo problema: Sales hacia tu trabajo, subes al auto y tratas de ajustarte el cinturón de seguridad, pero te das cuenta que la cajita donde se atora está descompuesta. No puedes conducir así, podrían multarte.

Solución: Atora el extremo del cinturón de seguridad con el cristal de la puerta. 

Tercer problema: Es viernes chelero en tu casa, has preparado todo para recibir a los amigos, pero de pronto te das cuenta que no hay desatapador. Seguramente alguien se lo robo en la última tertulia ¿qué harás? 

Solución: Puedes destapar las botellas con los dientes, pero si te preocupa el cuidado de éstos consigue una barra de madera resistente, un tornillo con su respectiva tuerca y un taladro. Ahora sólo tendrás que perforar la tabla con el taladro y acomodar el tornillo y la tuerca como se muestra a continuación. ¡Salud!

Cuarto problema: Te robaron el estéreo del auto y eres de las personas que no pueden andar por la vida sin música.

Solución: Consigue una grabadora vieja y un poco de cinta adhesiva transparente (también funciona con la de color, pero no se ve tan estético). Fija la grabadora al tablero de tu automóvil y listo, tienes un nuevo estéreo. Necesitarás hartas pilas.

Quinto problema: Tú y tus amigos organizaron una borrachera en la playa, ya lo tienes todo, sólo falta la hielera, pero como no la habías contemplado se sale de tu presupuesto.

Solución: Lleva tu lavadora.

Sexto problema: Se acabó el gas y necesitas hacer tu café.

Solución: Ve por tu plancha, acomódala en el piso con la superficie que se calienta hacia arriba, asegura la plancha de forma que no pueda voltearse y conéctala. Pon la cafetera encima y espera unos minutos hasta que hierva el agua. Nota: también puedes calentar una sartén de este modo.

Séptimo problema: Tiene que darle la mamila al bebé y hacer la limpieza de la casa al mismo tiempo.

Solución: Recargue a su 'chilpayate' contra el respaldo del sillón mientras de la da mamila, cuando el bebé alcance el estado onírico, acomode el biberón con unos cojines a la altura de la mano que sostiene el surtidor de leche, tal como se muestra en la fotografía.

Octavo problema: Su bebé es tan meón que se terminó la dotación de pañales de tres días en uno y el áureo líquido sigue fluyendo. Son las tres de la mañana, muy tarde para salir a comprar un nuevo paquete.

Solución: Haga una perforación del grosor de su meñique en un costado de un vaso que no utilice y que no piense utilizar más. Espere a que el querubín se quede dormido e introduzca el 'pizarrín' de éste por el orificio del vaso. Acomode el vaso entre las piernas del niño para que no haya accidentes.

Bueno, amigos, esto es todo por hoy; espero que estos consejos prácticos les sean de utilidad y recuerden que sobre cualquier situación lo más importante es cuidar la seguridad.

Gracias a Juan Pablo Lancia por enviarme estas imágenes a mi correo.

René Ostos ;)